Contenido
* 1
Introducción
* 2
Emboscadas Defensivas
*
3 Emboscadas Ofensivas
* 4 Reglas de
Comportamiento Generales
*
5 Las formaciones para
emboscadas
* 6 Núcleos
Urbanos
Introducción
En este texto
se describen las bases
para la planificación y
ejecución de emboscadas
por grupos de infantería
del tamaño de un
pelotón.
Básicamente
puede definirse a las
emboscadas como acciones
militares puntuales en las
que una fuerza se
desplaza sin ser detectada
hasta una posición
favorable y ataca por
sorpresa a otra fuerza
enemiga que entra dentro
de su zona mortal,
abandonando la zona luego
de la emboscada.
De esta definición se
deduce que cualquier
emboscada se compone de
tres fases:
1.
Despliegue: Consiste en el
desplazamiento de la
fuerza que montará la
emboscada desde territorio
seguro hasta la zona
escogida para el ataque.
Este desplazamiento
debe hacerse siempre sin
ser detectados por fuerzas
hostiles, ya que el
éxito de la emboscada
radica en mantener el
factor sorpresa hasta el
momento mismo del ataque.
Los medios de inserción
y despliegue dependen de
factores tales como el
terreno, la cercanía de
fuerzas propias, aliadas o
enemigas y los medios
disponibles para el
transporte.
El
tiempo suele ser un
factor crucial ya que
las emboscadas se preparan
para atacar tropas
enemigas en movimiento,
por lo tanto hay que
hacer siempre un balance
entre velocidad de
movimiento y capacidad de
permanecer indetectados. Hay
medios de inserción que
garantizan velocidad, pero
si no pueden garantizar
también el factor sorpresa
deben ser descartados.
Si se sospecha
que el enemigo tiene
conocimiento de la
presencia de la fuerza
de emboscada la operación
debe abortarse ya que
es impensable que pueda
montarse una emboscada
mientras fuerzas enemigas
rastrillan la zona.
2. Ejecución: Esta
fase comienza cuando acaba
el despliegue o inserción
y consiste en distribuir
al personal en sus
puestos, desplegar los
medios auxiliares (explosivos,
minas, obstáculos, señuelos,
etc.), delimitar la "zona
mortal", aguardar a que
el enemigo se encuentre
en la posición adecuada
y, finalmente, iniciar el
ataque.
Existen
tres tipos de distribución
estándar para el personal
de emboscada que se
explican más adelante así
como la utilización de
medios auxiliares, esa
distribución delimitará la
"zona mortal".
Hay que tener en
cuenta que dicha zona
es donde se concentrará
el grueso del poder
de fuego del pelotón
y, por lo tanto, es
una zona en la que
no debe existir personal
aliado durante la
emboscada.
3.
Repliegue: Se trata de
la retirada de la
fuerza de emboscada hasta
una zona segura, un
punto de reunión
intermedio o un punto
de extracción, lejos de
la acción de un
contraataque enemigo.
En esta etapa el
permanecer indetectado no
es una prioridad, aunque
puede representar una
ventaja si se logra.
El tiempo es
el factor clave a
tomar en cuenta durante
esta etapa, ya que
si el pelotón de
emboscada abandona rápidamente
la zona del ataque
podrá evitar enfrentamientos
con refuerzos enemigos o
"supervivientes" de la
emboscada.
Todas
las emboscadas cuentan con
esas tres fases que
deben ser planificadas en
conjunto antes de que
el pelotón entre en
acción.
Según el
espacio geográfico en que
se desarrollará la
emboscada y la cercanía
de tropas aliadas, propias
o enemigas se pueden
distinguir dos grandes
grupos en los que
variarán los conceptos a
manejar para las tres
fases anteriormente citadas.
Emboscadas Defensivas
Son las que se
realizan en territorio
controlado por fuerzas
propias o aliadas, lejos
de los refuerzos enemigos
o cuando la posibilidad
de respuesta enemiga está
limitada.
Los
objetivos de este tipo
de emboscadas suelen ser:
* Mantener el
control territorial evitando
el ingreso de las
tropas enemigas.
* Capturar medios del
enemigo, bien sean
vehículos, suministros,
personal, o información
valiosa.
* Forzar
al enemigo a desplazar
medios desde la línea
de frente hacia el
punto de emboscada,
debilitando su presencia
en otras zonas sensibles.
O forzarle a movilizar
fuerzas de reserva para
cubrir las bajas generadas
por la emboscada.
* Forzar al enemigo
a abandonar sus líneas
enviando refuerzos a sus
fuerzas emboscadas, debiendo
penetrar para ello en
territorio controlado y
defendido por las fuerzas
propias, generando de esta
manera más pérdidas
indirectas al enemigo.
En una emboscada
defensiva las fases de
despliegue y repliegue
suelen ser relativamente
fáciles, mientras que la
etapa de ejecución será
bastante más dura y
compleja ya que se
emboscará a una fuerza
de ataque preparada para
ingresar en territorio
hostil.
Es de
esperarse que esa fuerza
enemiga esté preparada
para trabar combate en
forma inmediata, eso
significa que su
infantería puede ir
andando a pie detrás
de sus vehículos y
sus tripulaciones andarán
a cubierto.
Una
emboscada defensiva suele
acabar con la eliminación
total de la fuerza
invasora, si hiciera falta
se podría perseguir a
los supervivientes hasta
las últimas consecuencias
mientras se mantenga el
control del terreno.
Una posibilidad para
evitar que los
"supervivientes" de la
emboscada puedan escapar
es destacar un binomio
"tapón" que se mantendrá
alejado de la fuerza
principal de emboscada
(aunque en contacto visual
con esta) vigilando la
retaguardia del enemigo
cuando éste ingrese en
la "zona mortal".
Este binomio tapón
estará conformado por el
TE del pelotón y un
fusilero que se mantendrán
a la distancia adecuada
para que el TE pueda
sacar partido a las
características de su
réplica, además este
binomio puede dar aviso
de la cercanía y
composición de la fuerza
enemiga antes de que
entre a la "zona
mortal".
Emboscadas
Ofensivas
Son las
que se realizan dentro
del territorio controlado
por el enemigo y
lejos de otras fuerzas
propias o aliadas.
Las etapas de
despliegue y repliegue
deben ser cuidadosamente
planificadas justamente al
contrario que en las
emboscadas defensivas.
Los objetivos de este
tipo de emboscadas suelen
ser:
*
Interdicción, dícese del
ataque preventivo a
fuerzas que aún no
han entrado en combate
o a los suministros
que abastecen a las
fuerzas enemigas.
* Eliminación de
tropas y medios antes
de que sean desplegados
en primera línea.
* Forzar al enemigo
a desplazar tropas de
primera línea o reservas
para realizar tareas de
seguridad interna.
* Negarle a unidades
enemigas específicas el
acceso a insumos de
reparación y mantenimiento,
suministros, mermando su
capacidad de respuesta
ante un inminente ataque
aliado o como parte
de un plan de
hostigamiento.
Las
fuerzas enemigas que
entran a la "zona
mortal" durante una
emboscada ofensiva suelen
estar relativamente
desprevenidas.
A
pesar de que capturar
suministros es más fácil
en una emboscada ofensiva
que en una defensiva,
debe considerarse que sin
una fuerza aliada (o
información veraz) que
asegure una ruta de
escape hasta un punto
seguro, la misión estará
condenada al fracaso.
La parte más delicada
suele ser el repliegue
que debe hacerse
velozmente para garantizar
la supervivencia del
pelotón de ataque.
Las emboscadas ofensivas
se inscriben en las
tácticas de "Hit &
Run". Una emboscada en
la que todo el
equipo atacante resulta
eliminado no puede
considerarse un éxito.
A fin de
facilitar el repliegue se
deben marcar puntos de
reunión intermedios y
difundirlos entre todos
los miembros del pelotón
antes de entrar en
acción, de esa forma
se procedería con rapidez
si fuera necesario dividir
el pelotón para evadir
refuerzos enemigos que
lleguen al área de
ejecución.
Una
emboscada ofensiva puede
acabar antes de la
eliminación total de las
fuerzas enemigas que se
encuentren dentro de la
"zona mortal". El líder
de pelotón debe considerar
ordenar el repliegue tan
pronto como se cumplan
los objetivos de la
emboscada, aún cuando
queden supervivientes. De
esa forma ganará preciosos
segundos que serán
decisivos en la etapa
de repliegue.
La
utilización de un binomio
"tapón" solo es
aconsejable si se emplea
para cubrir la retirada
del grueso del pelotón,
ya que separar ese
binomio con el mismo
fin que en una
emboscada defensiva lo
dejaría lejos de sus
camaradas y de las
rutas de repliegue, en
alto riesgo de encontrarse
con los refuerzos enviados
por el enemigo hacia
la zona de la
emboscada.
Reglas de
Comportamiento Generales
Estas reglas son de
aplicación en todos los
tipos de emboscadas y
en cualquier tipo de
distribución de personal
durante la fase de
ejecución.
*
Antes de abrir fuego,
todo el personal atacante,
debe procurarse una buena
cobertura cercana a la
cual desplazarse inmediatamente
en caso de que el
enemigo responda.
Abrir fuego inclinado
detrás de un árbol o
arrodillado tras un cambio
de rasante aseguran que,
de ser necesario, se
podría pasar a una
posición cubierta en
fracciones de segundo. Si
se diera el caso de
que un "soldado" no
encontrara una cobertura
adecuada antes de comenzar
a disparar deberá
comunicarlo al líder y,
si cuando comience el
tiroteo aún no está
cubierto, debe limitarse a
abrir fuego en defensa
propia para no atraer
sobre sí los disparos
del enemigo.
*
Es interesante el uso
de minas Claymore. Ya
sean accionadas por cable
como por control remoto.
* Es
prácticamente imposible asignar
blancos a cada soldado
de los que participan
en una emboscada, no
es posible hacerlo con
precisión durante la etapa
de planificación y mucho
menos cuando el ataque
se está realizando. Por
lo tanto se instruirá
a los soldados para
que empleen ráfagas
automáticas apuntando
ligeramente a cada blanco
abatible.
* La
distancia de seguridad en
combate es de 5 a
10 metros entre miembros
del mismo pelotón, si
por motivos de la
misión fuera necesario
posicionar a los soldados
en distancias superiores a
10 metros se debe
separar al pelotón en
binomios que operen dentro
del contacto visual de,
al menos, otro binomio
del pelotón.
Lo
ideal es crear binomios
con un especialista y
un fusilero, de esa
forma se evita que
el enemigo pueda abatir
a dos especialistas en
una misma acción.
* Los especialistas
ametralladores saben que
para sacar el máximo
rendimiento a su réplica
deben abrir fuego cuando
el enemigo se encuentra
enfilado.
Los
líderes deben facilitarles
a los ametralladores la
posibilidad de apostarse
de modo que la
trayectoria de sus
disparos coincida con la
dirección en la que
se mueve el enemigo
o tan cerca de ella
como sea posible.
* Hasta que el
líder de pelotón no
de la orden de abrir
fuego nadie disparará,
excepto en defensa propia
y solo tras haber
recibido disparos del
enemigo.
Si el
enemigo descubriera al
grupo de emboscada antes
de haber penetrado en
la zona mortal significará
que algo falló durante
la etapa de distribución
del personal. El líder
es el responsable de
esa y todas las
etapas que conforman la
operación.
La
orden más probable (que
no la única) que
puede dar el líder
en ese momento es el
de abortar la operación
y retirarse como sea
posible hasta un punto
de encuentro intermedio o
hasta una zona segura.
* El lider
puede dar la orden
de abrir fuego verbalmente
a todos los miembros
de su pelotón, aunque
lo más normal es que
se acuerde previamente una
señal clara y única
para empezar a abrir
fuego y una condición
para detenerse.
Por ejemplo: la
detonación de una mina,
una larga ráfaga de
ametralladora, etc. suelen
servir de orden de
abrir fuego debido a
que son suficientemente
claras y difíciles de
malinterpretar. El hecho
de no ver más
enemigos en condiciones de
combatir dentro de la
zona mortal suele servir
como señal para dejar
de disparar y se
tomará como tal a
menos de que se
especifique otra cosa de
antemano.
* Si
el líder diera la
orden de dejar de
disparar, ésta no debe
cumplirse en aquellos
casos en los que la
"vida" de un soldado
aliado corriera peligro
inminente.
El
líder puede ordenar el
cese el fuego, ya
que desde su posición
no es capaz de
observar movimiento enemigo
alguno y economizar
munición es una prioridad,
pero si tras la
orden algún miembro de
su pelotón identificara
una amenaza debe
reportarla de inmediato y
abrir fuego solo si
representa un peligro
inminente.
Las
formaciones para emboscadas
Estos esquemas
son "jugadas de manual",
será muy difícil encontrar
una situación en la
que se pueda aplicar
exactamente el esquema que
se muestra aquí.
Emboscada en Línea:
Esta formación es muy
simple y aún así
brinda buenos resultados.
Es fácil y rápida de
tender ya que es
similar a una "Línea
de Tiradores". Se debe
utilizar cuando se espera
que la formación enemiga
a emboscar sea una
columna. Los tiradores
pueden estar al mismo
nivel que el camino
o ligeramente elevados con
respecto a este. Los
ametralladores quedan en
cada extremo de la
formación para que sea
más fácil "enfilar" los
objetivos.
Emboscada
en "L": La formación
en "L" permite que
los ametralladores disparen
en paralelo a la
línea de avance del
enemigo y eso hace
que esta formación sea
especialmente eficaz contra
vehículos de transporte y
grupos de infantería a
pie.
Emboscada en
"V": Indicada para atacar
enemigos en movimiento que
no necesariamente avanzan
en columna. Hay que
tener mucho cuidado con
el fuego cruzado entre
los soldados de ambos
brazos de la "V",
para eso hay que
asegurarse de que los
miembros del pelotón están
apostados por encima de
los objetivos.
Núcleos urbanos
Los pueblos y
ciudades tienen un grave
problema para ser
empleados como escenario
de emboscadas porque es
imposible controlar todos
los sitios en los
que puede cubrirse el
enemigo una vez que
empieza el tiroteo, a
menos de que se
dispusiera de una fuerza
suficientemente numerosa como
para cubrir todas las
posibles rutas de escape.
Si no se
cubren esas rutas, antes
o después, algún enemigo
tendrá posibilidad de
salir de la zona
mortal y aparecerá por
el sitio menos vigilado
a dar por saco a
los atacantes.
No
se recomienda la
instalación de una
emboscada en un pueblo
cuando se cuenta con
poco personal, se requiere
de, al menos, un
binomio que cubra cada
posible salida de la
"zona mortal".
Un
problema recurrente en
este tipo de emboscadas
es el fuego cruzado,
para evitarlo hay que
pensar cuidadosamente la
posición de cada binomio.
Hay situaciones
puntuales donde una
emboscada puede realizarse
sin que se aseguren
todas las rutas de
escape por ejemplo para
casos de eliminación
puntual de un objetivo,
pero no para la
eliminación total de una
fuerza enemiga.